How I’m Feeling Now

La reina del pop experimental regresa con un álbum hecho en cuarentena. Y ¿puede competir con el debut de la Charli post-Vroom Vroom? Sí. Y sea a la izquierda, derecha, arriba, o abajo, me encanta que Charli siempre está empujando la ventana del estado del pop, sacándola de su sitio a propósito para ver qué pasa.

pink diamond tiene producción que tranquilamente podría ser del argentino EL PLVYBXY, pero ataca al oyente con láseres y vacíos melódicos; mientras que claws, producida por Dylan Brady, habita en el mundo de hongos mágicos y ratas de 100 gecs, qué sorpresa.

Pero este álbum muestra a una Charli más madura, que reconoce y acepta sus inseguridades, bastante distante a la Charli de Track 10, quien era olvidadiza de sus propias responsabilidades (personales y afectivas): 7 years es una reflexión de su vida amorosa y una oda a su pareja actual, que se encuentra en contraposición con enemy; mientras que en forever plasma su versión de lo que significa estar enamorada, al mismo tiempo que su voz lucha con brisas de viento, y creo que en cada uno de sus álbumes hay una canción con una outro maravillosa: acá es forever, en Pop 2 fue Track 10, y en Charli fue claramente Click, la cual regresa en la forma de c2.0, una capitalización de la energía caótica del outro dirigida hacia una melancolía de cuarentena, con producción de Cook que es bastante minimalista en comparación con su pasado, y que se posiciona cómodamente en la era de 7G.

Y visions, el final del álbum, es el “está todo bien” que muchos necesitábamos para este año de mierda.